El Barrio de las Letras está de moda. La propuesta cultural cada vez es más amplia, mercados, nuevos restaurantes, tiendas originales, hoteles, coctelerías... un gran abanico de posibilidades para disfrutar en Madrid a cualquier hora del día. Uno de mis descubrimientos favoritos de los últimos meses ha sido el restaurante Saporem, un lugar sin pretensiones pero al que no le falta detalle. 

Mucha madera, decoración con toques vintage, paredes decoradas con papel de periódico y una cuidadísima estética hacen que el comensal se sienta cómodo y dispuesto a saborear las delicias de su carta, pensada sobre todo para compartir y a precios asequibles.

Aunque puede aparentar no ser muy grande, la sorpresa llega cuando te adentras en el local y descubres su precioso patio cubierto climatizado, decorado con luces y mesas de madera, un rinconcito mágico y de lo más romántico para una cena en pareja o con amigos sin prisas.

Buenísimas sus ensaladas (la Saporem es un clásico ya), el ceviche, el pulpo a la brasa, el tartar de salmón y brécol, sus magníficas pizzas, sus platos de pasta, rollitos de pollo y mango, la hamburguesa o su wok de verduras. 

Las estrellas de la tarde son sus tartas en la original propuesta de sus artífices: las tardes de Cakes & Tonics, un maridaje de tartas con ginebras y vodkas para una velada diferente y llena de sabores, donde degustar sus deliciosas tartas caseras, de zanahoria, de cerveza, brownie de chocolate blanco, red velvet... junto a un riquísimo cóctel. Un plan perfecto ¿verdad?

Suele haber música en directo, jazz, bossanova... conciertos ideales mientras tomas una copa de vino junto a tu pareja en el patio cubierto, una velada inolvidable y encantadora sin duda. Cuando se conoce Saporem pocos son los que no repiten la experiencia, yo misma lo he visitado en varias ocasiones y a diferentes horas del día para poder disfrutar de todas sus facetas y todas ellas son de diez.

Un local que no deberías dejar de visitar, buenos platos, buen ambiente y un excelente trato. Tienen un menú del día económico y buenísimo, cosa que es de agradecer. Si tenéis pensado ir en fin de semana es recomendable reservar porque suele estar bastante lleno. Un éxito, porque cuando algo tiene calidad, el boca a boca es el mejor reclamo.

Dirección: c/ Ventura de la Vega, 5.

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