“Cerveza artesanal de Valencia, natural y de calidad”, reza la etiqueta de la botella de cerveza artesanal Tyris. Después de la desaparición de Turia, Valencia vuelve a tener una cerveza propia, elaborada con el mismo proceso de hace siglos y empleando ingredientes naturales para conseguir el verdadero sabor de este caldo milenario que nació en el antiguo Egipto y que fue refinado siglos después por los monjes belgas. La cerveza Tyris es el resultado de una apuesta empresarial de dos jóvenes valencianos empeñados en elaborar cerveza para su ciudad. La despersonalización de las cervezas industriales ha traído como consecuencia el retorno de las microcervecerías que apuestan por un producto local de alta calidad pensado para un cliente con ganas de innovar en sus hábitos cerveceros. Su nombre refuerza este argumento, haciendo un guiño a los primeros elaboradores de cerveza en estas tierras, el pueblo íbero. – lasprovincias.es Si eres un enamorado de la cerveza y quieres descubrir más sobre ella, apúntate a esta experiencia de la mano de Groupon. Visita la fábrica de Tyris para conocer el proceso de elaboración y después haz una cata ilimitada de cerveza, acompañada de un picoteo de frutos secos, snacks, jamón, queso… ¿Quieres una pista de lo que vas a ver? Mira este vídeo de Canal 9.   Momento cata ¡pruébalas todas Paqui Brown cerveza dulce con maltas Cara para enfatizar su sabor suave y delicado. Smoky Porter cerveza negra con toques ahumados con sabor intenso y lúpulo inglés. Au Yeah cerveza rubia con carácter americano, color dorado y abundante, densa y blanca espuma. ¿Quieres ver más? Consulta este vídeo de lasprovincias.es. Riu Rau cerveza de color amarillo cobrizo, densa y turbia, con espuma abundante y persistente. Vipa cerveza de color ámbar muy intenso con espuma abundante y compacta inspirada en las IPA’s inglesas. Tyris cerveza de color dorado ámbar intenso y algo turbio con espuma persistente, una pale ale con toques de trigo. “Tyris resulta ser una cerveza suave, floral, con un carbónico muy bien integrado y un leve pero agradecido punto de amargor final … tiene el defecto, o la virtud, de invitar a repetir, pues un solo botellín acaba quedándose corto. Valencia recupera su orgullo cervecero.” ramonkasparov, verema.com