El viaje

Este viaje urbano incluye la visita a dos joyas portuguesas: Oporto y Lisboa. El primer día, se aterriza en Oporto. Allí, el alojamiento tiene lugar en un hotel de tres estrellas, y se disponen de dos días completos para descubrir esta vibrante ciudad portuaria.

El cuarto día, se realiza el traslado en tren hacia Lisboa, un trayecto de aproximadamente tres horas y media que permite recorrer Portugal de norte a sur. En la capital, se puede disfrutar del característico fado lisboeta y visitar el Puente 25 de Abril, un puente colgante sobre el Tajo construido por la misma compañía responsable del Golden Gate de San Francisco.

El séptimo día marca el regreso en avión, aún bajo el resplandor del atardecer, rumbo al hogar.

Alojamiento

Oporto En Oporto, el alojamiento se lleva a cabo en el Legendary Porto Hotel, un establecimiento de tres estrellas ubicado en el centro de la ciudad, cerca de lugares emblemáticos como la Sé do Porto y la Igreja e Torre dos Clérigos.

Las habitaciones dobles estándar, amplias y luminosas, están decoradas con un estilo minimalista. La paleta de colores aporta un aire moderno y fresco. Todas las habitaciones están equipadas con aire acondicionado, televisión por cable, caja fuerte, plancha (disponible bajo petición), set de té y café, y baño privado con artículos de aseo.

Lisboa En Lisboa, el hospedaje corresponde al Hotel Miraparque, un hotel de cuatro estrellas situado junto al Parque Eduardo VII, en las cercanías del centro de la ciudad. Este parque lleva el nombre del rey inglés que visitó Lisboa en 1902 para reforzar la alianza entre Portugal y el Reino Unido.

Las 96 habitaciones están amuebladas con sencillez y disponen de ventanas insonorizadas, zona de trabajo y baño privado. Además, cuentan con aire acondicionado, wifi gratuito, televisor de pantalla plana, minibar y caja fuerte.

Guía Groupon de Lisboa y Oporto

Lisboa es una de las ciudades más en boga en los últimos años y es que cada vez son más los españoles que se decantan por conocer la capital del país vecino. Su riqueza cultural, su ambiente y cómo no, su gastronomía, bien merecen una visita. Recorra el barrio Alto y descubra los locales de ocio que hay en él, pasee por Belem y quédese boquiabierto ante la preciosidad de su torre o la inmensidad del monasterio de los Jerónimos. Saboree los exquisitos pasteis de nata (también conocidos como pasteles de Belem) y las miles de variantes culinarias del bacalao... Vaya los días que vaya, seguro que se queda con ganas de volver.

Oporto es una ciudad con encanto, cargada de historia y nostalgia, en una combinación perfecta de elegantes barrios y villas señoriales con estrechas calles y antiguos callejones. El Monasterio de la Sierra del Pilar, la Iglesia y el Museo de San Francisco, el Palacio de la Bolsa, la Torre de los Clérigos o la Estación de San Benito son visitas que no pueden pasar por alto en esta ciudad. Pasee por la zona de Ribeira, siéntese en uno de los restaurantes y disfrute de la gastronomía de la zona mientras contempla el río y las bodegas. El bacalao, las tripas a modo do Porto, la francesinha o las natas, los pastelitos típicos rellenos de nata, todo acompañado de un vino con denominación de origen harán la delicia de su paladar.