El lavado interior del vehículo incluye:

• Aspirado (no incluye cepillado) de alfombrillas, moqueta, asientos, bolsillos de puertas y maletero.
• Limpieza de salpicadero, salidas de aire y botones de alrededor (con productos renovadores y cepillos especializados).
• Limpieza de cristales y espejos.

El lavado exterior del vehículo incluye:

• Lavado con champú de pH neutro, en el que se usa un sistema de cubeta de protección de grano doble, para evitar que las piedras y las partículas de bordes afilados se introduzcan en el vehículo a través de la esponja de lavado.
• Limpieza de ruedas y llantas (con cepillos especiales y producto limpiador no ácido, a base de cítricos).
• Eliminación de óxido de las llantas (con producto limpiador ácido).
• Aplicación de líquido repelente de lluvia y suciedad en las llantas.
• Limpieza con agua a presión de puertas, tapones de gasolina, arcos y partes de las secciones inferiores.
• Secado a mano con toallas de microfibra profunda.

Tratamiento de ozono:

• Tiene como objetivo tratar de eliminar del automóvil los malos olores sin dejar residuos.
• Para ello, se introduce en el interior del vehículo un generador de ozono que transforma el oxígeno del aire en ozono, el cual puede actuar como desinfectante natural contra hongos, bacterias, ácaros y malos olores, además de oxigenar y purificar el aire.

La limpieza de tapicería (solo asientos) incluye:

• Tapicería textil: se realiza el cepillado de asientos, previamente expuestos a un producto especial para ayudar a la posterior extracción de manchas y suciedad con una aspiradora de succión húmeda. El limpiador que se utiliza está específicamente diseñado para revivir las fibras.
• Tapicería de cuero: se realiza una inspección de las sillas para detectar el deterioro y la suciedad, además de un aspirado minucioso de asientos para evitar que cualquier partícula de tierra o arenilla pueda arañar su estructura. Todas las superficies de cuero se limpian, lustran, y alimentan con aceites esenciales, según su grosor y calidad.

El lavado de motor de vehículo incluye:

• Lavado con agua a presión o detergentes específicos y aire comprimido (sin agua).
• Secado en el caso de la opción de agua a presión.
• Lustrado con vinilo abrillantador para los plásticos del motor con silicona.